Suspensión

Adicionalmente a la seguridad del conductor y los pasajeros, esta componente del sistema de suspensión contribuye a la estabilidad general del vehículo. De hecho, constituyen una parte fundamental del triángulo de seguridad del automóvil, que abarca la dirección, el sistema de frenado y la estabilidad en general. Sin amortiguadores, el vehículo podría volverse inestable y perder el control.

Otro factor de seguridad que respalda la necesidad de cambiar los amortiguadores es la adherencia. Si no fuera por estos componentes, el vehículo no se deslizaría suavemente por la carretera, sino que rebotaría sobre el asfalto, afectando negativamente el control y la manejabilidad del automóvil.

Los amortiguadores pueden deteriorarse por diversas razones, siendo un punto vulnerable debido a la fricción generada por los diferentes tipos de carreteras que un vehículo puede recorrer durante su vida útil.

Entre las razones que pueden causar el deterioro de los amortiguadores y requerir una reparación se incluyen el esfuerzo del vehículo al transportar cargas pesadas, las elevadas temperaturas, la oxidación causada por la sal, e incluso el propio envejecimiento del automóvil.

Es aconsejable cambiar los amortiguadores después de alcanzar los 65,000 kilómetros y evitar esperar hasta los 90,000 kilómetros antes de realizar el cambio. Además, se recomienda realizar el reemplazo por ejes en lugar de piezas individuales. Esto implica que, si es necesario reparar solo uno de los amortiguadores en el eje delantero o trasero, ambas piezas de ese eje deben ser sustituidas para asegurar un desempeño adecuado.

Como has podido notar, es altamente recomendable cuidar el buen estado de los amortiguadores, realizar controles periódicos y sustituirlos tan pronto como sea necesario para garantizar la longevidad de tu automóvil. En Torre 3 te ofrecemos una tarifa única que abarca el cambio de amortiguadores, la alineación del eje delantero o trasero según corresponda, y la mano de obra, todo incluido en el mismo precio.